Misión: Imposible – Sentencia Final está arrasando en taquilla, rumbo a convertirse en la más recaudatoria de la saga. Un éxito que se explica a través de la soberbia puesta en escena, donde Tom Cruise ha vuelto a superarse una vez más con secuencias asombrosas como la del avión y la del submarino, las cuales convierten a Misión Imposible 8 en un espectáculo.

Cruise se ha pasado el juego en Misión: Imposible – Sentencia Final, y eso que ya nos tenía acostumbrados a escenas de acción impresionantes durante las siete entregas anteriores de la saga. El nivel de dedicación y perfeccionismo en Cruise es absoluto, convirtiendo en realidad situaciones de esas que diríamos en condiciones normales: claro, es una película.

En esta octava entrega de la longeva saga de acción, la secuencia que sin duda se ha llevado los focos es la de los aviones cuando Ethan persigue al villano Gabriel. Y no es para menos, puesto que subirse en el aire a las alas de un biplano, haciendo todo tipo de acrobacias, es merecedor de todos los halagos. Por mucha preparación, medidas de seguridad y demás, no muchos, y menos una estrella de Hollywood como Cruise, se atreverían con una secuencia que te deja al borde de tu asiento con la boca abierta, sabiendo que no hay trucos de CGI.

Escena del avión de Tom Cruise en Misión: Imposible - Sentencia Final
Paramount Pictures

La escena del submarino Sebastopol en Misión Imposible 8 también tiene tela

En Misión: Imposible – Sentencia Final, la única oportunidad de derrotar a la IA conocida como La Entidad pasa por recuperar su código fuente original del submarino Sebastopol. Hundido en las profundidades del océano, a Ethan no le queda otra que sumergirse y acceder a este. Con un traje especial proporcionado por la marina, llegar al núcleo del reactor del Sebastopol no es nada fácil, estando el camino lleno de obstáculos, como es el caso de los torpedos del submarino.

Para la escena en cuestión, se utilizó un tanque con capacidad para 8,5 millones de litros de agua, el cual estaba dispuesto sobre una estructura que permitía girarlo para recrear las vueltas del submarino cuando se va deslizando hacia el abismo oceánico.

En la secuencia, a medida que el Sebastopol va girando sin control, los torpedos se mueven libremente, teniendo Ethan que sortearlos e incluso, una vez recuperado el Podkova, estando a punto de quedarse atrapado bajo uno de ellos. Siendo el tanque de agua real, con Cruise sumergiéndose de verdad en este, mientras va dando vueltas, como no iban a ser los torpedos reales

Sí los torpedos de la secuencia son reales

Lo ha revelado el coordinador de acrobacias de Misión Imposible 8, Wade Eastwood, durante una entrevista en el podcast The Empire Film Podcast.

“Lo más fácil del mundo habría sido que Tom nadara y reaccionara a los torpedos generados por computadora. Así habría sido. Pero luego aparecen las estelas de burbujas generadas por ordenador y hay que ajustar las tomas de la placa. Has hecho toda esta increíble secuencia de verdad, y de repente estás nadando y algunos espectadores dicen: ‘No, se ve que es generado por ordenador. Estoy desconectado’”.

Continúa: “Tom no quiere que el público esté desconectado. No quiere que los engañen… Solo quiere hacerlo de verdad tanto como pueda. Como actor, quiere reaccionar a estas cosas, ¿sabes?”.

La cuenta de torpedos reales ascendió finalmente a cinco, llevando meses y meses para testas que fuera seguro, si no destaca Westwood que no lo hubiesen hecho. Aún así, Cruise se llegó a quedarse “atrapado”.

“Quedó atrapado una vez. No estuvo mal, porque Tom puede contener la respiración durante mucho tiempo. Antes de que terminara de ser atrapado, ya le estaba quitando la cosa”.

En definitiva, porque en la edición 2026 de los Oscar todavía no estará incluida la categoría a mejores especialistas, sino Tom Cruise copaba las candidaturas.