Una película de la saga Predator estará de nuevo en las carteleras de los cines de todo el mundo, siete años después del último precedente. Lo hace con Predator: Badlands, un largometraje que inicialmente estaba concebido para ser una secuela de Predator: La presa.

Estrenada en 2022 directamente en streaming, La presa protagonizada por Amber Midthunder se convirtió en un éxito. Bajo la dirección de Dan Trachtenberg, la franquicia se vio relanzada gracias a este filme ambientado en 1719 que tiene como protagonista a Naru, una joven comanche que se enfrenta a un Yuatja enviado a la Tierra de cacería.

La buenas críticas y el entusiasmo generalizado de la audiencia, catalogándola como una de las mejores películas de Predator, propició que en este 2025 tengamos dos películas. Primero se estrenó, también en streaming, Asesino de asesinos, y ahora es el turno de Predator: Badlands, una cinta con una premisa novedosa al convertir a un Yautja en protagonista.

En ella, un joven predator de nombre Dek (Dimitrius Schuster-Koloamatangi) está decidido a demostrar su valía tras ser marginado por su clan. Para ello, emprende un peligroso viaje en busca del adversario definitivo, contando con la ayuda de Thia (Elle Fanning), una sintética de Weyland-Yutani.

En un principio, Predator: Badlands era una secuela de La Presa

Elle Fanning como Thia en Predator: Badlands
20th Century Studios

A raíz de la buena acogida de la película liderada por Midthunder, se pensaba que la siguiente entrada en la saga sería una continuación de la historia de Naru. Trachtenberg ha revelado recientemente durante una entrevista que la idea inicial era que Predator: Badlands fuese una secuela de Predator: La Presa. Sin embargo, en un momento del desarrollo, pensó que lo mejor es que no hubiese ningún humano en la trama, para así no robarle el protagonismo a Dek.

«Consideré la posibilidad de emparejar a Naru y a Dek antes de que se convirtiera en Thia. Pero luego pensé: ‘Bueno, entonces no estoy siguiendo la premisa’”, dice Trachtenberg a ScreenTime. “Quería mantener la premisa del depredador como protagonista y sin humanos en la película. Así que más adelante pensamos que podríamos hacer cosas más interesantes con Naru».

Finalmente, el hueco para Naru lo ocuparon con Thia, consiguiendo que, al ser una sintética de la icónica compañía de la saga Alien, técnicamente no hubiese una humana en la historia. Además, a consecuencia de esta decisión, sí que se puede hacer una continuación propiamente dicha de Predator: La Presa, donde el protagonismo recaiga en Naru.

La primera piedra para ello se puso en Asesino de asesinos, donde en los compases finales se muestra a Naru en el planeta de los predator. Este cameo es un indicio de que en algún momento después de La presa, Naru fue apresada por los Yautja, al igual que lo fueron los protagonistas de la película animada.

Hace no mucho, Trachtenberg desveló que la hoja de ruta pasa por hacer una secuela directa de Predator: La Presa, siempre y cuando Predator: Badlands tenga éxito.