La Lista Final: Lobo Negro tiene un episodio 6 de alto voltaje, cuyo final deja a Ben y compañía en una posición crítica por fiarse de quien no debían. El spin-off liderado por Taylor Kitsch se encamina hacia el desenlace de su primera temporada con un giro de guion esperado, pero no por ello menos impactante.
ATENCIÓN SPOILERS: Este artículo contiene detalles del episodio 6 de La Lista Final: Lobo Negro
En un año de grandes series, Lobo Negro es una de las que sobresale por encima del resto, constatando que el universo de Jack Carr da para mucho. Y eso que, el spin-off de La Lista Final no tiene el respaldo de ningún libro del escritor estadounidense, sino que es una producción de guion completamente original. Haciéndose valer de uno de los personajes más interesantes, como es Ben, el propio Carr y David DiGilio han abierto la puerta para que no sea una serie de una única temporada, sino de muchas más.
A través del episodio 6 de La Lista Final: Lobo Negro titulado Peones y Reyes, las cartas se han puesto sobre la mesa. Ya se sabe quiénes son héroes y quiénes villanos, entrando en este último grupo nada menos que Haverford, pese a sus intentos por despistar a aquellos que él mismo reclutó.
Un capítulo que comienza centrado en Raife, a quien conocer que torturó y mató a un agente de la inteligencia alemana le deja bastante tocado emocionalmente. Una manera de expiar su pecado es llevar al que era su aliado a una iglesia, dejando allí su cuerpo. En el juego del espionaje, saber identificar a los enemigos es la clave, pero una parte importante es hacerlo también con los amigos.
Ben cae igualmente en la trama, aun habiendo sido advertido
Mientras Raife hace por expiar sus pecados, Ben tiene que ingeniárselas para salir de Suiza. Herido a consecuencia de la bomba que depositaron en el coche que viajaban él y Eliza en el episodio anterior, la principal prioridad es curarse para llegar al punto de reunión establecido por Haverford.
Paralelamente, Tal también está huyendo, no quedándole más remedio que esconderse después de su enfrentamiento con el individuo que se encargaba del portal seguro entre Haverford y El Pastor. Por si no fuera poco la paliza que lleva en su cuerpo, Tal se entera en una estación de trenes de que Eliza ha muerto y de que Ben iba con ella cuando sucedió.
Ya en Alemania, Ben toma todo tipo de precauciones a la hora de que no le sigan hasta el punto de reunión. En un barco le esperan Mo, Landry y Haverford, a quien nada más ver comienza a interrogar por aquello que le contó Eliza de que el Mossad sospechaba de sus intenciones.
Haverford, zorro viejo, intenta hacer ver a Ben que le han engañado dándole información falsa y que El Pastor está detrás de todo ello. Mientras está dando las explicaciones pertinentes, todas mentira por cierto, llega Raife, quien revela que aquellos que atacaron en el túnel para robarles los cojinetes eran en realidad agentes de la inteligencia alemana. Estaban en mitad de una operación contra Irán, intentando prevenir males mayores al entregar cojinetes falsos para las centrifugadoras de uranio.
El Pastor entra en escena en el episodio 5 de La Lista Final: Lobo Negro
A lo largo de la temporada no se ha parado de hacer referencia a que Haverford tiene un informante iraní que le pasa información. El agente de la CIA culpa a El Pastor de todo lo que ha sucedido, incluyendo el ataque a Eliza y el engaño para atacar a los alemanes.
Para calmar las aguas, Haverford afirma que tiene retenido a El Pastor, siendo este ni más ni menos que Vahid, hermano de Cyrus Rahimi, hombre elegido por parte del ministro de Irán para negociar el acuerdo nuclear.
Haverford afirma que El Pastor iba a ayudar a detener a su hermano, pero que le ha mentido y, por ende, traicionado. Dice que los usó para bloquear el ataque alemán debido a que el ministro iraní se enteró de sus planes, recurriendo a la fuerza Kudus para eliminarlos de la ecuación en el túnel. Haverford hace ver que por culpa de Vahid fueron delatados y Eliza está muerta por ello.
Todo parece muy convincente, pero al final del episodio 6 de La Lista Final: Lobo Negro descubre todo el pastel, pero ya llegaremos a ese punto. De momento, Haverford hace que Vahid llame a su hermano para confirmarle que tiene los cojinetes y cuándo hará entrega de ellos. Afirma que los mensajeros de la red Khalid estarán al día siguiente en un aeródromo para hacer el intercambio.
Una vez entregado el mensaje, Haverford ejecuta a sangre fría a Vahid. Lo justifica diciendo que es por Eliza, pero la realidad es que lo hace para que no se sepa la verdad.
Raife lo deja
Desde el principio, Raife no estaba muy seguro de unirse al equipo de la CIA, pero lo hizo por ayudar a Ben y en última instancia tener la posibilidad de volver a los SEAL. Sin embargo, todos los actos que han llevado a cabo durante la operación le parecen de lo más reprobables, viéndose ese sentimiento acrecentado desde que torturó al espía alemán.
Teniendo muy claro que no va a seguir, se lo comunica a Ben, quien, por cierto, no está nada de acuerdo con la forma de pensar de Raife. A pesar de que Ben le intenta convencer de que participe en la operación del aeródromo para así obtener respuestas, Raife lo tiene muy meditado.
A todo esto, Tal no está nada tranquila con respecto a Haverford y El Pastor, así que decide continuar investigando para sacar a la luz la verdad. En teoría, El Pastor está muerto, ¿no?, pero Tal descubre que Haverford se sigue comunicando con este, por lo que Vahid no era su informante.
Un final explosivo para el episodio 6 de La Lista Final: Lobo Negro
Ben, Mo y Landry acuden al aeródromo para entregar los cojinetes falsos. El problema es que el ministro, quien está allí presente, quiere hacer una prueba para testar que son auténticos, lo cual en principio pone en peligro a los tres. Sin embargo, cuando meten uno de ellos en un dispositivo centrífugo, para su sorpresa resulta que no son una falsificación.
Todo se explica, debido a que Haverford siempre ha sido el traidor y en realidad El Pastor no era Vahid, sino su hermano Cyrus. Todo este tiempo, Haverford ha engañado al equipo, teniendo un plan para que Irán se haga con los cojinetes. Resulta además que, la muerte de Vahid se produjo debido a que iba a delatar a su hermano, habiendo confiado en los alemanes para que se encargasen de que los cojinetes no cayesen en malas manos.
El motivo que aduce Haverford para ayudar a Irán a hacerse con los cojinetes es para que Cyrus se convierta en ministro de exteriores. Ello, según el de la CIA, permitiría que las relaciones con Occidente fuesen mejores y evitaría que no hubiese que recurrir a las armas nucleares.
A todas luces, parece que ha perdido absolutamente la cabeza, pues dar poder nuclear a Irán para hacer ministro a su amigo no tiene ningún sentido. ¿Qué pasaría si a Cyrus le pasa algo? Pues que este ya no estaría y no habría ningún control sobre las armas nucleares.
Lo bueno de esto es que Tal ha cogido infraganti a Haverford hablando con El Pastor, por lo que ahora ya saben quién los traicionó e hizo que mataran a Eliza.
De perdidos al rio
Ben, Mo y Landry son alertados por Tal de que El Pastor está vivo y que Haverford es culpable. Esto lleva a los tres a tomar medidas desesperadas para recuperar los cojinetes, acribillando para ello el avión del ministro, no dejando títere alguno con cabeza. No obstante, a pesar de estar gravemente herido, el ministro llama a Cyrus, escuchando este y Haverford los disparos por el altavoz, sabiendo este último que su equipo se ha enterado de todo.
Antes de abandonar el aeródromo, hay un plano en el que se ve a Raife con un rifle de francotirador. Aunque tenía sus reticencias, finalmente sí que cubrió a sus compañeros por si algo salía mal.
Teniendo ahora a Haverford como objetivo, el equipo vuelve al barco en su busca, pero este no está y lo único que hay es un email donde les incrimina de todo lo sucedido. La cosa se complica y mucho de cara al último episodio de la temporada, pero Ben afirma que no está todo perdido, pareciendo tener un plan para acabar con el villano y salir airosos de la situación.